21 de diciembre de 2014

Compartir & Volar

Foto de Kinka Photography en Aerodium


Apenas publiqué ¿Qué hombre querrían las Hadas? se me ocurrió preguntarlo en Twitter.
Y muchas Hadas no se hicieron esperar.
Respondiendo en forma resuelta desde la soledad, la compañía o la duda.
Dejando opinión, espíritu y Sueños sobre la mesa, en tuits tan genuinos como contundentes:

@mikiai:
Yo no quiero que me superen, quiero que me motiven, que crean en mi más que yo misma... Igualdad <3
No quiero alguien que me haga sentir pequeña. Quiero compartir logros y momentos... Compartir es una palabra genial <3

Principalmente, alguien q me deje volar... Y q de vez en cuando tenga ganas de acompañarme (soy un poco como Tinker Bell).

@mmeJW:
Me quedaria con el que nos complementáramos. Ni más. Ni menos.
Eso no se explica, eso se vive, dia a dia con un otro. Sucede o no sucede.

@MarAbad:
La pareja ideal es la que saca lo mejor de ti, te apoya y te da libertad.

@iVidaenPositivo:
El que tengo ahora ;)
Porque es mi compañero, mi amigo, mi amante, lo admiro y además me hace reír todos los días. Es todo lo que pido a un hombre. ;)

@yTuArteMaria:
Qué pregunta difícil... Creo que es preferible buscar pistas haciendo foco en lo que vos quisieras. Recomiendo leer "El Arte de Amar" de Erich Fromm.

@mimoyh:
Un ser esencialmente Humano para compartir cada nuevo día con asombro de niños y fascinación de nómade explorador.


Y leyendo estas respuestas me quedan dos verbos, compartir y volar.
Que no se pueden dar sin compañía, amistad, libertad, apoyo.
Sin Fe en un@ mism@, en la persona con quien se está, en amb@s.
Sin buscar complementarse cada día.
Porque compartir y volar son disfrute, mas sostenidos con trabajo.
Trabajo de ver y saber con quien estás.
Trabajo de acompañar.
Trabajo de sostener, cuando el vuelo se complica.
Trabajo de generar ganas de seguir volando.

Pienso en mí como varón, en mi Historia personal.
No me es grato reconocer cuánto déficit de trabajo por mi parte llevó a que dejara de volar.
Algo que puedo ver ahora, que todo pasó, para que sirva de aprendizaje.
Alzo la Mirada más allá de mí, y con esas palabras de las Hadas miro el Universo de los Hombres.
Y la Realidad es que los varones no tenemos mucha idea, ni de compartir ni de volar.
Puede plantearse que la Testosterona nos setea para que esto sea así.
Mas también somos moldeados por una Mentalidad Decrépita que viene desde la Noche de los Tiempos, desmoronándose desde mediados del Siglo XX hasta hoy, y que se nos enseña a perpetuar.
Una Cultura basada en la Escasez y la Guerra.
Donde importa la competencia.
Y arrancar a otr@s un botín, un tesoro a perseguir. No compartir un recurso.
Para aspirar al Triunfo, al Exito, un Nombre.
Algo único, que haga a un@ valios@.
Con el Poder de taparle la boca a l@s demás.
Y a eso, le llamamos volar.
Cuando el vuelo es otra cosa.
Que tiene que ver con entregarse a un Sueño, a la Creación de un Proyecto.
Que con otr@, implica verl@ como a un Par, más allá de toda diferencia.
Alguien tan valios@ como un@ mism@.
Que por eso, se vuelve un espejo ¡y AY! Muestra de un@ lo que no acepta ver, menos cambiar, no digamos corregir.
Ahí está el trabajo para el que nadie te prepara.
Porque trabajo, para nosotros, es ganar dinero nada más.

En estos Tiempos de Transición, donde todo se tambalea y está en discusión, parece cumplirse este principio del Kybalión:


Como es arriba, es abajo.
Como es adentro, es afuera.


Y las Hadas no vuelan porque sí, los Varones tampoco estamos mirándolas en tierra sin saber qué nos pasa sin razón.
Estamos presos de nuestro propio Mundo.
Sin reconocer que ya nos quedó demasiado pequeño.
Inventamos Máquinas que están por generar Abundancia sin necesidad de competir.
Desarrollamos una Civilización con tantas opciones y campos que para destacar no hace falta avasallar, solo comprometerse en el Fruto del propio esfuerzo.
Las Hadas quizá se hayan dado cuenta antes, tan simple como eso.
Y nos esperan en el aire: no por no querer bajar, sino porque no le ven necesidad a volver atrás y tampoco lo harán.

El Desafío para los varones, ahora: abrir las Alas, sin saber si las tenemos.
Con terror a dar el salto y no volver a tocar el suelo.
Ante esto, los vaivenes políticos, económicos, sociales se esfuman en una nube de migajas: excusas hechas con miedos para tapar miedos.
Cuando se trata de pasar a otro nivel de Vuelo.
Claro que hace falta heroísmo, el tema es que los manuales de Hollywood no sirven.
Porque no se trata de correr gritando GO, GO, GO manejando con pericia infinitas versiones de armas, símbolos de nuestros penes.
Tiene que ver con usar los ojos para ver Sueños.
Con abrir las manos y animarse a acariciar.
Afinar los oídos y escuchar el Corazón.
Todas cosas que no se enseñan.

Creo que este Siglo 21 es el Siglo de las Hadas.
Mas este Desafío para los varones lo definirá todo.
Porque es una grieta profunda, que si no se resuelve resquebrajará cimientos.
De hecho, ya está pasando. No la estamos encarando y salta la violencia en toda forma, el fundamentalismo y dogmatismo buscando tapar todo con Statu Quos, que justifican cualquier atrocidad y estupidez.
Sigo creyendo que estamos a tiempo de afrontar todo esto.
Mas queda poco.



2 comentarios:

  1. Me encanta tu reflexión y tu trabajo para construir una nueva masculinidad, sin resentimientos hacia la maravilla del vuelo... Gracias gracias gracias!

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  2. Lovely!! Creo que en el fondo todas buscamos lo mismo. Un amor que nos haga crecer...

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